Museo de la Memoria Afropanameña
La Real Aduana de Portobelo, situada en Portobelo, Panamá, desempeñó un papel histórico crucial como centro del comercio entre América y España durante los años de la colonia. Construida originalmente en el siglo XVII y reconstruida tras la destrucción sufrida en el siglo XVIII, esta imponente estructura de ingeniería civil es un testimonio de la importancia estratégica de Portobelo en las rutas comerciales internacionales de la época. En su interior, se gestionaba el tráfico de mercancías preciosas como el oro, las piedras preciosas y otros productos de América hacia España, contribuyendo significativamente a la economía colonial española.
En su interior se ubica el Museo de la Memoria Afropanameña, que tiene como objetivo rescatar y preservar la rica herencia y cultura afrodescendiente de Panamá. Este museo busca ir más allá de la historia de la esclavitud, centrándose en mostrar la historia completa y la contribución significativa de los afropanameños a la sociedad panameña.
El proyecto contempló la distribución de 3 temas:
SALA 1
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Portobelo: ciudad y puerto. El tráfico de esclavizados entre África y las América
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La trata de esclavizados africanos en el Istmo de Panamá (Hispanoamérica)
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Discriminación legal: el sistema de castas
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Rol de la población afrodescendiente libre en la sociedad y economía panameña
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Movilidad social de la población afrodescendiente
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Formas de obtener la libertad: cimarronaje, manumisión y ahorro
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Rol de los esclavizados en la construcción de obras cívicas y militares
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Rol de la población afrodescendiente en las milicias
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El proceso de abolición de la esclavitud en Panamá
SALA 2
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El ritual congo
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Huellas de la esclavitud africana
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El Cristo Negro de Portobelo
Exteriores
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La aduana: sus usos y espacios
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Evolución arquitectónica: los tres edificios de la aduana.
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La defensa de la aduana por los Portobeleños en 1744
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La feria de Portobelo.
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El complejo defensivo de Portobelo
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La restauración de la Aduana
El proyecto museográfico se desarrollo a partir de la contraposición de 2 conceptos complementarios: Austeridad y Riqueza. Por un lado en la sala 1 se desarrolló una línea mobiliaria y gráfica austera para reflejar la austeridad material bajo la cual la vivió la gran mayoría de los afropanameños mientras que la sala 2 buscó reflejar la riqueza inmaterial de su cultura.
Debido a la importancia patrimonial de los espacios buscamos crear ambientes museográficos que no compitieran con las características arquitectónicas del edificio sino que las resaltaran siguiendo el planteamiento conceptual.
Para la sala 1, optamos por formas simples a partir de estructuras tubulares sin grandes recubrimientos siguiendo la forma de los espacios hábiles para su instalación. De esta forma, el espacio se ocupo con esbeltos volúmenes sin impedir el acceso visual. Por otra parte, se incorporaron diferentes elementos interactivos analógicos y digitales en el diseño del mobiliario, además de panelería en Braille certificada por SENADIS.
Para ilustrar los diferentes temas se elaboró una propuesta artística basada en la combinación de 3 estilos artísticos: el collage de Giana de Dier con 8 piezas sobre los diferentes trabajos realizados por los afropanameños en la época colonial, las pinturas de Ariel Jiménez, Manuel Golden, Virgilio Esquina de la Espada, Yarabi Guevara sobre las formas de obtener la libertad y el mestizaje en América y una imagen realizada en inteligencia artificial sobre un militar afropanameño en época colonial.
En el caso de la Sala 2, decidimos crear ambientes inmersivos seccionados a partir de estructuras de grandes dimensiones con elementos audiovisuales y participativos.
Para la primera parte, diseñamos una estructura circular intervenida por Yeiza Mosquera, Reinaldo Esquina, Jiseel Muñoz y Miriam Lemus,artistas de la localidad de Portobelo para recrear un espacio sagrado con alegoría a los distintos elementos de la cultura congo.
La siguiente parte corresponde al espacio participativo que busca complementar al mueble circular con la instalación de los 3 tambores congos dispuestos de manera circular para que las personas puedan sentarse y tocarlos. Estos tambores serán acompañados con paneles con información relacionada a la gastronomía y los instrumentos musicales.
La última sección corresponde a un espacio con una vitrina para exhibir tanto el traje del cristo negro de la colección de piezas de Ministerio de Cultura como información audiovisual sobre las ofrendas que le hacen sus devotos y las narrativas sobre su llegada a Portobelo.
